Esta no es la campaña publicitaria de alguna casa de alta costura en un escenario fuera de contexto, esto es una realidad del Congo, o el otro Congo, o como lo titulé, esto es el Congo elegante.
Con la muestra del World Press Photo (que ya les mencioné en el post anterior) me acordé de una foto que yo había visto hace mucho tiempo, que era la de un anciano extremadamente bien vestido, pero que vivía en un lugar muy pobre. Se trataba de un miembro de la SAPE (La Societé des Ambianceurs et des Personnes Élégantes), algo así como La Sociedad de las Personas Elegantes (yo no sé francés). Sus miembros, conocidos como sapeurs, son personas que visten ropa de las más elegantes casas de moda europeas, pero que no necesariamente tienen un estilo de vida acomodado. Incluso algunos llegan a gastarse los ahorros de su vida en comprar este tipo de ropa para pertenecer a este exclusivo club, porque de eso se trata, de pertenecer, de ser "alguien" pero no para el mundo, sino para sus pares, para su propia comunidad.
La Sape se formó a raíz del caos que se armó bajo el gobierno de Mobutu, el cual impuso que todos debían vestir las ropas típicas africanas (asi como uniformar a todo un pueblo! me muero!). Los sapeurs fueron los primeros en rebelarse ya que admiraban la forma de vestir europea (con la llegada de los franceses al Congo) y se opusieron a esta medida dictatorial. En esa época un joven no tenía mucho con qué sentirse mejor consigo mismo, por eso que el vestuario para los sapeurs fue fundamental para lograr mantener una identidad. Fue a tal nivel, que la SAPE se convirtió en casi un culto religioso. Una religión bastante cara, los sapeurs no solo visten elegantes de forma, sino también de fondo, sus trajes son de marcas que ni nosotros pensaríamos comprar (nosotros, me refiero a jóvenes de clase media común y corriente), se gastan la vida en un traje, pero para ellos andar bien vestido es sinónimo de éxito.
En la muestra del sábado, algunas de las fotos ganadoras fueron las de Francesco Giusti, un fotógrafo italiano que se dedica a documentar realidades sociales, identidad , entre otras cosas. Estas son algunas fotos de sapeurs que él sacó.
Con la muestra del World Press Photo (que ya les mencioné en el post anterior) me acordé de una foto que yo había visto hace mucho tiempo, que era la de un anciano extremadamente bien vestido, pero que vivía en un lugar muy pobre. Se trataba de un miembro de la SAPE (La Societé des Ambianceurs et des Personnes Élégantes), algo así como La Sociedad de las Personas Elegantes (yo no sé francés). Sus miembros, conocidos como sapeurs, son personas que visten ropa de las más elegantes casas de moda europeas, pero que no necesariamente tienen un estilo de vida acomodado. Incluso algunos llegan a gastarse los ahorros de su vida en comprar este tipo de ropa para pertenecer a este exclusivo club, porque de eso se trata, de pertenecer, de ser "alguien" pero no para el mundo, sino para sus pares, para su propia comunidad.
La Sape se formó a raíz del caos que se armó bajo el gobierno de Mobutu, el cual impuso que todos debían vestir las ropas típicas africanas (asi como uniformar a todo un pueblo! me muero!). Los sapeurs fueron los primeros en rebelarse ya que admiraban la forma de vestir europea (con la llegada de los franceses al Congo) y se opusieron a esta medida dictatorial. En esa época un joven no tenía mucho con qué sentirse mejor consigo mismo, por eso que el vestuario para los sapeurs fue fundamental para lograr mantener una identidad. Fue a tal nivel, que la SAPE se convirtió en casi un culto religioso. Una religión bastante cara, los sapeurs no solo visten elegantes de forma, sino también de fondo, sus trajes son de marcas que ni nosotros pensaríamos comprar (nosotros, me refiero a jóvenes de clase media común y corriente), se gastan la vida en un traje, pero para ellos andar bien vestido es sinónimo de éxito.
En la muestra del sábado, algunas de las fotos ganadoras fueron las de Francesco Giusti, un fotógrafo italiano que se dedica a documentar realidades sociales, identidad , entre otras cosas. Estas son algunas fotos de sapeurs que él sacó.
Es impresionante el contraste que generan, tan elegantes pero en un contexto de pobreza total. Pareciera que se hubieran quedado pegados viviendo en la época de trajes clásicos, sombreros, guantes, zapatos de vestir y pañuelos de seda, 3 colores máximo se permiten para ser un verdadero sapeur, no es una elegancia al azar, existen reglas dentro de este imperio de la moda.
Son verdaderas celebridades cuando aparecen en las calles, llevan havanos en las manos pero no los fuman (son demasiado caros para usarlos una sola vez) y todo lo que llevan encima tiene un costo por lo bajo de 500 euros aproximadamente. Los sapeurs no son una mafia, son personas con estilo y moral.
“Lo que verdaderamente distingue a un sapeur, mucho más allá de la elegancia, es su moral. La gente nos conoce, nos admira, somos personajes públicos. Por eso un auténtico sapeur nunca se pelea ni roba, tampoco maltrata a su mujer o se va con la esposa del vecino. Un buen sapeur reza y va a la iglesia”
(profeveronicamedina.blogcindario.com)
Son verdaderos caballeros del estilo, lo mejor es que no sólo visten elegantes, sino que la gracia de un sapeur está en su creatividad. Indudablemente la logran plasmar en cada cosa que se ponen.
Me encanta que la moda tenga historia, me encanta que esta moda haya sido el resultado de una rebelión. No quiero juzgar si está bien o mal lo que hacen, no viene al caso, sino que nos demos cuenta que la moda o el buen gusto no viene necesariamente de cuánta plata tienes, sino de cómo eres. No deja de ser impresionante que en un país donde hay gente que muere de hambre, otros se pasean con cientos de euros encima, pero así de paradójica es la vida a veces. Indudablemente ellos sirven de inspiración donde no existen esperanzas, donde la única forma de ser alguien en un lugar sin oportunidades, es vistiéndose bien.
Son verdaderas celebridades cuando aparecen en las calles, llevan havanos en las manos pero no los fuman (son demasiado caros para usarlos una sola vez) y todo lo que llevan encima tiene un costo por lo bajo de 500 euros aproximadamente. Los sapeurs no son una mafia, son personas con estilo y moral.
“Lo que verdaderamente distingue a un sapeur, mucho más allá de la elegancia, es su moral. La gente nos conoce, nos admira, somos personajes públicos. Por eso un auténtico sapeur nunca se pelea ni roba, tampoco maltrata a su mujer o se va con la esposa del vecino. Un buen sapeur reza y va a la iglesia”
(profeveronicamedina.blogcindario.com)
Son verdaderos caballeros del estilo, lo mejor es que no sólo visten elegantes, sino que la gracia de un sapeur está en su creatividad. Indudablemente la logran plasmar en cada cosa que se ponen.
Me encanta que la moda tenga historia, me encanta que esta moda haya sido el resultado de una rebelión. No quiero juzgar si está bien o mal lo que hacen, no viene al caso, sino que nos demos cuenta que la moda o el buen gusto no viene necesariamente de cuánta plata tienes, sino de cómo eres. No deja de ser impresionante que en un país donde hay gente que muere de hambre, otros se pasean con cientos de euros encima, pero así de paradójica es la vida a veces. Indudablemente ellos sirven de inspiración donde no existen esperanzas, donde la única forma de ser alguien en un lugar sin oportunidades, es vistiéndose bien.
Estos gallos son increibles! sobre todo por su mentalidad! Había leido de ellos en un reportaje y me llamaron demasiado la atención!
ResponderEliminarNo deja de parecer un poco trágico esto. Tragico cómico, claro.
ResponderEliminarPuedo comprender lo que han decidido crear, el nivel de evasión y la búsqueda de ser alguien entre estos atuendos ostentosos en comparación al mundo que los rodea.
Finalmente permanecen alienados de su realidad, gastando lo que no tienen y que otros podrían necesitar incluso para un simple plato de comida...
¿Pero es eso criticable? ¿Acaso eso no sucede igualmente acá?
Claro acá las diferencias no son tan 'chocantes' pero es la misma cosa, lo que se gasta una sra. en una cartera de famosa marca, alimenta a no se cuantas familias!
El hecho en si, es cuestionable, pero tanto como otro millón de cosas que pasan en nuestra sociedad chilena u occidental. Al menos su evasión no es delictual, no es agresiva, solo es por tener 'algo' que haga diferente y especial sus vidas y la moda siempre es 'algo' maravilloso...
P.D: Latera yo ah? xD
Saludos ;)
Anteriormente había leído algo de ellos y visto algunas fotografías, es bastante fuerte ver a personas muy bien vestidas con marca de diseñador y de fondo las calles o comercios del Congo bastante a mal traer, se ven impecables entre tanto polvo y calles muy mal pavimentadas y un calor de locos.
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